jueves, 27 de junio de 2013

PIZZA JARDIN

Hola, hola!

Qué tal vais de calor?? Yo a ratos, porque para estar de vacas, guay, pero para estudiar... Uff!!
En fin, a ver si llegan ya las dichosas vacaciones de una vez y nos vamos todos por ahí, no?? :)

Esta semana os traigo un clásico de la gastronomía: pizza.
En concreto nos vamos a Pizza Jardín, una cadena de restaurantes super conocida aquí en Madrid que como todos los sitios tiene sus más y sus menos. De momento os dejo su web para que busquéis el que mejor os pille y ya de paso cotillear la carta (si es que no habéis ido nunca, claro!).
Nosotros estuvimos en el que está en el C.C.Moraleja Green porque el salón es super chulo y en verano tienen una terraza estupenda :)

Como viene siendo habitual, en la carta podemos encontrar entrantes (en mi opinión bastante caros) y ensaladas (mucha mejor opción, sobre todo si es para compartir.
Nosotros nos decantamos por una ensalada St Andrews: espinacas, cebolla confitada y jamón asado.
Estaba muy buena, pero realmente no tiene nada de especial, es una ensalada que cualquiera podría hacer en su casa.
A Tony le aburre la ensalada
Al ser un restaurante italiano, no faltan las pastas ni las pizzas en la carta, pero además tienen algunas carnes y fondues con muy buena pinta, pero fuera de nuestro presupuesto.
Para compartir siempre he creído que lo mejor es pedir un par de pizzas y probar un poco de cada, así que elegimos una pizza fusión (con huevos fritos y jamón serrano) y una fiorentina (mezcla de quesos, champiñones frescos y bacon).
En esto sí se puede decir que son buenos: buena la masa, buenos los ingredientes, buen horneado... Nos gustó mucho.
Pizza fusión (arriba) y fiorentina (abajo)
¿Y qué es una cena sin postre? Pues una cena sosa, pero como no hay money, money, pues nos tomamos un helado que no fue ni digno de foto xD
Pero que conste que tienen un montón donde elegir y que seguro que se os hace la boca agua solo con leer los nombres.

Como ya he dicho más arriba hay bastantes restaurantes por todo Madrid, pero si tengo que destacar algo (dejando aparte la comida) del que estuvimos nosotros serían dos cosas.
Por una parte el buen ambiente y  una bonita decoración, haciendo guiños a la naturaleza, muy "selvático". Pero por otro lado el servicio fue nefasto: tardaron años en tomarnos nota, nos trajeron dos ensaladas antes de acertar con la que habíamos pedido, otra larga espera con las pizzas, y a la hora de pedir los helado nos trajeron sabores que no habíamos pedido y que no sabíamos que tenían en la carta. Un desastre, vaya.
De precio sale por unos 16€ por persona pero sin pedir nada del otro mundo.
Una cosa buena es que suelen sacar promociones muy a menudo, así que no dudéis en usarlas porque realmente merecen la pena (y vuestro bolsillo os lo agradecerá! jeje!).

Valoración general: un 7, y creo que es más que suficiente. Es el típico sitio para hacer cenas grandes con grupos y para "impresionar" a tu pareja en la primera cita, pero hay sitios con mejor calidad, mejor precio y, sin duda alguna, mejor servicio.

Y aquí nos quedamos hoy. Un beso muy fuerte a todos, esperando que os haya gustado lo arriba escrito, y en especial, un super abrazo a Alba, que aunque se nos haya ido a hacerse las inglaterras, siempre será la mejor camarera del mundo, jeje!

Carolina.

domingo, 23 de junio de 2013

URBAN DINER

¿Qué pasa comilones?

¿Cómo os van las cosas? Yo estoy ya deseando hacer los dos últimos exámenes que me quedan para empezar a disfrutar de verdad las vacaciones, y mientras tanto, comiendo y cenando para luego contaroslo todo con pelos y señales.

Antes de nada me gustaría anunciaros que tengo un nuevo blog llamado Habitación 213 y me encantaría que os pasarais por ahí de vez en cuando. Es la cara nueva de mi antiguo fotolog y, a pesar de que me ha dado mucha pena dejarlo "de lado", empiezo super contenta esta nueva etapa :)

Bueno, y ahora vamos al lío.

Esta semana hemos estado en un tipo de restaurante que se está poniendo muy de moda. En concreto, me refiero a los "american diner" de los años 60 que parece que ahora salen hasta de debajo de las piedras.
Entendedme, no es que no me gusten (si no, no iría) pero ya han dejado de ser una novedad. Pin ups, cuadros blancos y negros, tapicerías imposibles... lo único que salvo es comer con rock de fondo, jeje!

Esta ocasión fuimos al Urban Diner, que está en la calle Génova 25 (metro Alonso Martínez L4, 5 y 10) y tienen una web donde vais a poder ver, además de la carta, un montón de fotos.
Parte de la llamativa decoración
La carta no es especialmente amplia pero comida para todos los gustos.

De entrantes pedimos unos nachos (nos estamos haciendo unos expertos) que llevaban guacamole, queso, jalapeños, salsa picante y crema de queso. No estaban mal pero no me gustaron demasiado porque la crema de queso creo que no pegaba ni con cola, además que no le aportaba ningún sabor nuevo.
Por otro lado, y para probar otra cosa que la archiconocida ensalada césar, pedimos una ensalada con queso azul y nos pasó lo mismo que con los nachos: estaba buena, pero la crema de queso no era gran cosa. Y como dice Tony: "lo que no suma, resta".
Cómo destaca la dichosa crema blanca!
Como principal Tony pidió una hamburguesa y es curioso porque en vez de tener varios tipos, solo tienen dos tamaños y tú eliges los ingredientes de entre una gran lista además de la carne, lechuga y tomate, y las consabidas patatas fritas. Me pareció un sistema distinto y bastante bueno puesto que muchas veces no te gusta ningún tipo y tienes que andar pidiendo que te quiten o te añadan algo.
Y yo, para salir de la rutina hamburguesera, elegí un sándwich de pollo con salsa barbacoa y queso, que realmente estaba muy bueno.

Mi sándwich y la hamburguesa de Tony de fondo
Y ya para acabar pedimos tarta de queso (había más cosas, pero íbamos mal de tiempo y nos pareció lo más "ligero") que estaba muy correcta: estilo americano, nada empalagosa, sirope de fresa... Rica, rica.

Yo con sendas tartas de queso
De precio me parece que está muy bien: creo recordar que las hamburguesas rondaban los 5€, los entrantes, perritos y sándwiches algo menos, los postres unos 3... yo creo que por unos 12€ se puede cenar perfectamente.
Además es un sitio muy recomendable para ir a merendar o tomar algo con amigos.
Nos atendieron muy bien, aunque cuando empezó a llegar gente tardaron bastante más. Quizá les haga falta algo de personal cuando se llena.

Valoración general: un 8.5, porque la cena transcurrió perfectamente pero la comida no me acabó de convencer, se me hizo algo pesada. Rezan que todo es fresco, pero tengo mis dudas, sobre todo con las salsas y parte de los entrantes.

Y una vez más, espero que os haya gustado la experiencia de hoy y que me sigáis recomendando tantos sitios: me voy a poner como una ballena! Jaja! Pero gracias! xD
Un besote muy grande y hasta la próxima!

Carolina.

P.D. siento el color rosa de las fotos! Estábamos sentados justo debajo de un neón de ese color y ha salido todo como si estuviésemos en el país de Barbie! Jaja!

domingo, 16 de junio de 2013

HABESHA

Hola de nuevo!!
Qué poquito queda para la entrada oficial del verano, qué bien! Yo estoy como loca por coger vacaciones y más aún por acabar los exámenes, que parece que no va a llegar nunca el 2 de julio :(
Paciencia...

Esta semana Tony y yo hemos ido a probar algo totalmente nuevo y nos hemos quedado con la boca abierta de la buena elección que hemos hecho.
Como ya os he dicho alguna vez, me encanta probar comida nueva pero tengo unos principios muy "estrictos" que no suelo saltarme: no pimiento, no picante y nada vivo.
...y el viernes pasado me los salté de buena gana, jaja!

Os cuento: estuvimos cenando en un restaurante etíope llamado Habesha. Está en la calle Manuela Malasaña 17 (metro Bilbao L1 y 4, o San Bernardo L2 y 4), y tienen una web recién estrenada que está muy, muy bien y donde vais a poder ver toda la carta con fotos además de otras curiosidades.

Lo primero que vais a notar es que a pesar de que la decoración es bien sencilla, desde el principio vais a sentir que os habéis teletransportado a África: fotos, objetos decorativos, colores... todo te hace pensar que ya no estás en Madrid.

Saluda Tony! Que salimos en el espejo!
Nunca habíamos probado este tipo de cocina, así que agradecimos un montón que la carta tuviese fotos y sobre todo que nos explicaran tan bien cada plato; aún así yo solo os voy a contar un poco por encima todo lo que comimos sin entrar en mucho nombres porque no los recuerdo bien :S

Para compartir pedimos fatira, que es como una torta hecha trocitos con huevo revuelto. Era super suave sencillo, y estaba bastante buena.

Un plato sencillo pero rico
Y después nos trajeron una bandeja enorme con un montón de cosas. Por una parte había una especie de crêpes (injera, creo que se llama) a modo de pan pero hecho con harina de otro cereal distinto al trigo (ni idea de cuál es). Y por otra parte había varios guisos y estofados: pollo, lentejas, espinacas, ternera, patatas, queso... Todos estaban  riquísimos aunque había dos o tres que picaban cosa mala y otro con pimiento (argh!), pero como ya digo todo muy, muy bueno. Bien hecho, sabores profundos, calentito... Genial.
Qué montón de comida y qué rico todo!
Tengo que reconocer, y sin que sirva de precedente, que no conseguimos acabárnoslo todo: estaba todo espectacular pero tuvimos que dejarnos un pelín de los "crêpes".

Y como yo no sé vivir sin postre, tuvimos que pedir un par de baklavas para irme completamente contenta a casa.

¿Cómo se puede vivir sin postre?
Destacar sobre todo la buena atención y rapidez con la que nos atendieron: en menos de 45 mins habíamos cenado y en ningún momento nos faltó de nada, realmente bien en este aspecto.
Por otra parte decir que el precio es inmejorable: principales entre 5 y 9€!! Es decir, que por menos de 15€ cenas perfectamente. Aunque si no habéis probado nunca este tipo de comida, os aconsejo pedir alguno de los especiales, y por 12€ podréis comer una degustación de varios platos.
Cierra los lunes, pero el resto de la semana tienen horario contínuo.

Valoración general: un 9.5, y no les pongo un 10 porque me dijeron que un guiso picaba, y luego resultaron ser tres, aunque según Tony es que yo tengo el paladar muy sensible, jaja! En serio, un sitio que realmente merece la pena conocer. Volveremos.

Y por hoy esto es todo.
Un beso muy fuerte a todos, gracias por todos los comentarios que sé que me vais a dejar (jeje!) y nos vemos el próximo día!

Carolina.

domingo, 9 de junio de 2013

ALBATROS TEX-MEX

Hola de nuevo!

Os iba a hablar del mal día que hace, pero como este tiempo es tan cambiante, seguro que si alguien lee esto en unos días hace un calor horrible, así que directamente os hablo de otra cosa: 8000 visitas!
Sí, sí sí! Increíble pero cierto! Y entradas con más de 300! Uauh! No veais la ilusión que me hace! :D

Hace un par de semanas salimos en un diario digital de Chamberí, hay varios restaurante que ya me siguen en Twitter y Facebook, así como algún que otro cocinero y/o crítico gastronómico... Parece que poco a poco este proyecto va cogiendo color y es genial.
Siempre he querido dedicarme a algo relacionado con la hostelería y la restauración, y ya que no me va a ser posible, al menos tengo esto entre manos que tanta ilusión me hace. Sé que no voy a llegar a ser la mejor crítica culinaria del mundo, pero al menos me llevo una preciosa experiencia. Y en grandísima parte gracias a todos los que me leéis, así que muchísimas gracias!

Y después de este emotivo momento, vamos al lío!
Ah! Los exámenes ya están hechos, ahora toca esperar a las notas, uf!

Esta semana hemos estado cenando en el Albatros Tex-Mex, un bar/restaurante estilo western en el madrileño barrio de Vicálvaro, en concreto en la calle Lago Erie 3 (metro de Vicálvaro L9). No tienen web pero podéis buscar su perfil en Facebook y ver algunas fotos.

Fuimos totalmente a ciegas y sin saber qué nos íbamos a encontrar, y tengo que reconocer que en un momento me pensé si entrar o no, pero una vez dentro me acabó convenciendo.
Eso sí, seamos realistas, no os penséis que os vais a encontrar con lujos, no. El Albatros es el típico bar de barrio solo que con un encanto especial.

Sin duda lo que más llama la atención es la decoración: una oda al lejano Oeste en toda regla. Cabezas de vaca, herramientas de aserradero, instrumentos musicales, muebles de madera, fotos de indios... e incluso la música te invita a enfundarte unas botas, calarte un sombrero y bailar como Coyote Dax! Jaja!


Como os podéis imaginar, la carta también está relacionada con el western: carnes a la brasa, barbacoas, hamburguesas... y también perritos y ensaladas. Una cosa que me gustó mucho y me llamó la atención es que tienen cerveza y comida apta para celíacos.

Como ya os he dicho, Tony y yo íbamos un poco despistados, así que pedimos unos entrantes para empezar: ensalada de salmón, patatas con mojo picón y un combo de alitas, aros de cebolla y croquetas.
La presentación no es su fuerte, aunque tengo que decir que todo estaba bastante bien.

Unos entrantes para ir haciendo hambre.
Después supongo que lo lógico hubiese sido pedir carne, pero para cenar no nos apetecía, así que fuimos a por los perritos. Tienen 4 tipos y pedimos uno de cada, para probar.
A priori parecían bastante distintos, pero lo cierto es que luego todos sabían más o menos igual a pesar de tener ingredientes distintos. Quizá fuese por la cebolla o la lechuga... Pero estaban buenos y nos dejaron bastante satisfechos.

Cada cual con sus perritos, que no queremos discusiones!
De postre nos ofrecieron brownie, pero no tenían, así que nos lo cambiaron por muffins, pero tampoco tenían, así que al final nos hicieron un crêpe enorme de chocolate y nata para compartir.
Creo que fue lo que menos me gustó de la cena puesto que la masa, aunque tenía buen aspecto, estaba increíblemente dura! Quizá porque lo hicieron demasiado tiempo o porque llevaba mucha harina... Pero también cayó, que Tony y yo somos de muy buen comer, jaja!
Tenía buena pinta, verdad?
Como curiosidad decir que todas las semanas dan "clases" de baile western y conversación en inglés. Y creo que también hacen algún que otro concierto de blues.
El dueño era un tipo muy majo (parecía un auténtico cowboy!) y la camarera que nos atendió era un encanto (aunque tardó un poco porque había bastante gente en la zona de la barra).
De precio está bastante bien, unos 10€ por persona si no pédís nada especial, y creo que es un sitio perfecto para ir de cañas con los amigos y ya de paso cenar algo desenfadado.

Valoración general: un 7. No es lo que nos esperábamos, pero al final la cena salió bien y, sin duda, fue una noche distinta. Por otra parte, creo que deberían esmerarse un poco más con la comida porque un sitio así podría tener mucho gancho.

Bueno, aquí se acaba nuestra aventura por el "far west" y espero que os haya gustado, o al menos que os hay hecho sonreír :)
Un besote muy grande para todos y nos vemos en el próximo post! Feliz semana!

Carolina.

lunes, 3 de junio de 2013

SUBIENDO AL SUR

Hola a todos!

Por fin puedo decir que he acabado los exámenes! Wiiii! Tengo que hacer aún un par más en Julio y veremos a ver qué tal las notas de estos últimos... pero aún así, estoy más que contenta :)
Y desde aquí mando una vez más un montón de suerte a los que se están examinando estos días, que ya queda muy poquito para acabar!

Lo primero que voy a hacer es una pequeña aclaración sobre la entrada anterior, la del Brillante.
Hubo un montón de comentarios sobre el famoso bocata de calamares y la mayoría fueron buenos, pero también he podido leer alguna queja. Respecto a esto último solo puedo decir que mi experiencia en este bar es solo del que está en Eloy Gonzalo (en el de Atocha solo he estado una vez y fue de pasada) y no tengo ni la más mínima queja: te tratan muy amablemente por mucha gente que haya y todos los bocadillos están muy buenos (mi preferido es el de salchichas con queso! bueno, y el de lacón, y el de boquerones, y el de calamares, y...). Pero a los demás sitios no he ido, así que no puedo "criticarlos" aunque se llamen de la misma manera.

Dicho lo cual, os cuento la aventura de hoy.
El pasado miércoles tuve clase por la mañana y por la tarde, y entre medias dos horas libres. Como no me daba tiempo a ir y a volver a casa a comer, Tony y yo decidimos dar una vuelta por plaza de España y buscar un sitio donde comer. Quisimos ir a un peruano, pero estaba cerrado por jubilación (si alguien sabe de alguno, que me lo diga, por favor!), así que de casualidad nos encontramos el Subiendo al Sur.

Subiendo al sur es un restaurante/tienda muy especial ya que todo lo que tienen es de Comercio Justo. Se encuentra en la calle Ponciano 5 (metro Plaza España L3 y 10, y Noviciado L2) y ésta es su web por si queréis echar un ojo antes de ir.

Nada más entrar ya llama la atención por su colorida decoración y la buena música que suena. Es una atmósfera de buen rollo que te hace sonreír y contemplar los cuadros que todos los meses van cambiando.

Sin duda una decoración muy original y colorida
Según nos contaron, no tienen carta (al menos a diario) pero hay menú a mediodía y para las cenas.
Puedes elegir entre 5 primero y 5 segundos por 9,50€ de gastronomía mediterránea y sudamericana.
Van cambiando el menú así que cada vez que vas es como ir a un sitio distinto pero siempre igual de bueno.

De primero nosotros tomamos tacos de taco de frijoles con pollo y tortitas de maíz con mousse de queso. Ambas cosas estabas acompañadas de ensalada y estaban realmente buenas: muy buen sabor, muy buen punto de cocinado, bien presentado... Genial.
Hasta la comida está llena de color!
De segundo elegimos pollo al estilo peruano (que resultó ser el típico pollo asado) y lasaña de verduras (que tenía una salsa de tomate riquísima! aunque lo cierto es que toda ella estaba de muerte!). Ambas cosas me gustaron mucho, aunque quizá el pollo me decepcionó un poco porque me esperaba algo más elaborado.

Qué buena estaba la lasaña!
Y para acabar un buen postre: leche asada de coco (nunca lo había probado y la verdad es que está super bueno, y nada empalagoso!) y pastel de manzana (también muy, muy buena, porque la mezcla del hojaldre y la crema era perfecta!).

Si nos dejan, nos comemos hasta las cucharas!
Más cosas por comentar: tienen take away (aunque no sé si el menú, o carta...) y preparan comida para caterings (por si a alquien le interesa hacer un evento un poco más solidario y bien rico).
Según he leído también hacer conciertillos en el local y por lo que parece los findes por la noche tienen muy buen ambiente para tomarse una copa.

Valoración general: un 9.5. Todo lo que comimos estaba delicioso y (excepto el pollo) me pareció muy original, cosas que no comes todos los días. Por otra parte me encantó la decoración (me enamoré de los manteles!) y nos atendieron super bien: muy atentos, no tardamos en comer porque no tuvimos que esperar entre plato y plato, y no nos faltó de nada. Además, de precio me pareció genial.Volveremos seguro.

Bueno, espero que os haya gustado esta entrada tanto como a mí la experiencia, y no dudéis en ir a probar, seguro que no os arrepentiréis ^^
Un besote muy grande a todos y gracias de antemano por todos vuestro comentarios, likes, RTs... :)

Carolina.